Lic. Ernesto García Díaz
Abogado y periodista independiente
Farmacias sin Polivit o Multivit.
Desabastecimiento preocupa por ser suplemento básico de frutas, vegetales y
carnes
Ante la carencia de alimentos fortificantes en su forma
natural (frutas, por ejemplo), muchos médicos han sugerido a las familias
cubanas que sus niños, jóvenes y personas de la tercera edad tomen los
complejos multivitamínicos B, que intervienen en el metabolismo de los hidratos
de carbono, proteínas y lípidos. El Polivit o Multivit (así se denominan en
Cuba) fortalecen por demás el sistema inmunológico y óseo ante posibles
enfermedades.
La indicación médica no viene dada por obra del azar, seguramente los
galenos han decidido tomar partido en ello para evitar que la población
cubana, continúe perdiendo los niveles vitamínicos que debe tener una persona.
Pero el medicamento ahora no existe.
Ante esta situación, las farmacias, semanalmente, mantienen el pedido de
esta medicina, pero la industria farmacéutica cubana no le responde, ni da una
explicación clara.
En La Habana no hay las vitaminas. Conversando con un baracoense sobre la
alarmante situación, aprovechó y llamó a su familia en Baracoa, para saber si
allí lo encontrarían, pero resultó infructuosa la gestión. En Camagüey y
Matanzas, tampoco existe, e incluso el Nutriforte, que es de esa familia, está
igualmente perdido.
En varias droguerías que visitamos en el capitalino reparto de El Vedado,
situadas en las calles L y 15, 19 y 18, y 17 y M, las dependientas expresaron:
-No hay el medicamento, no sabemos cuándo lo situarán, lo pedimos todas las
semanas, pero no lo envían, parece que está en falta total.
Exterior farmacia de 23 y 16, en El Vedado_foto de Ernesto García
En la botica de 23 y 16, una empleada manifestó:
-¿Polivit? No tenemos, dicen que lo sustituirá el Nutriforte,
pero no lo hay ahora.
Nadie sabe lo que pasa con la ausencia del complejo vitamínico y lo que es
peor, a los médicos que lo recetan, no le explican la situación real que
presenta el mismo.
En Cuba, durante la crisis económica del llamado “Período Especial”, en los
años noventa, miles de personas enfermaron –irreversiblemente- por falta
de vitaminas, sobre todo del complejo B. Se expandió la nuritis (periférica y
óptica), que dejó dolencias de por vida en la población. El gobierno comenzó a
distribuir el mencionado Polivit a través de organizaciones de masas, como los
Comités de Defensa de la Revolución (CDR), cuyos funcionarios llevaban las
tabletas a las casas, además de una equis cantidad de pollitos para criar, pero
éstos morían rápidamente.
Las gestiones del gobierno llegaron demasiado tarde. Ahora vuelve la
alarma.
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