jueves, 4 de septiembre de 2014

“De aquí no me voy hasta que baje Martí”



 Lic. Ernesto García Díaz
Abogado y periodista independiente


Una mujer protesta en la Plaza de la Revolución. Decidida a que alguien la atienda, no se cansaba en decir: “Los que roban están arriba”

Foto-galería de Ernesto García


LA HABANA, Cuba.- Ante un nutrido grupo que entraba al Memorial José Martí, en la Plaza de la Revolución, una mujer gritaba a viva voz:
-¡Ellos hacen lo que les da la gana! Me tienen que atender.
Me acerqué y pregunté su nombre.
-Me llamo Inalvis Castiñeiro-, respondió.
La mujer desesperada clamaba porque alguien con poder suficiente la atendiera. Ya estaba cansada, según dijo, de tanto caminar, de hacer diligencias y que nadie le diera respuesta a sus problemas.
Le recomendé que utilizara el artículo constitucional 63 sobre el derecho de queja y presentara su escrito en la oficina de Atención a la Población, del Consejo de Estado. Entonces replicó:
-Yo no escribo, ni camino más. Me van a tener que atender. De aquí no me muevo.
Inalvis Castiñeiro manifestó a continuación:
-Quieren hacer las cosas como les da la gana. Están acabando con la gente, están acabando con el país. Tienen la cara dura. Los que roban están arriba (señalando la sede de gobierno). De aquí no me voy hasta que baje Martí, el Che, Fidel…
Inalvis estaba siendo vigilada. Un funcionario de guayabera blanca, sin llamar mucho la atención, se le acercó. Ya estaba bajo control. Minutos después llegó el encargado de sacarla del lugar.
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Un día antes de estos sucesos, el artista del lente Roberto Chile dejó inaugurada en el Memorial José Martí una exposición audiovisual denominada “Fidel es Fidel”, para rendirle tributo al dictador.
-Un sueño hecho realidad-, manifestó el fotógrafo al periódico Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba.
Chile se refería a los últimos tiempos que tuvo de cerca a Fidel Castro, luego de 25 años trabajando con él. -Es lo que presento en esta muestra: material testimonial de la última década-, dijo al periódico.
El miércoles 13, día del cumpleaños 88 del dictador, este reportero visitó la exposición. Para entrar al Memorial, como norma, los cubanos tienen que pagar tres pesos moneda nacional (no equivalente al dólar).
“Fidel es Fidel” presenta un texto acompañante de Arleen Rodríguez Derivet, periodista oficialista. Al fondo de la muestra se encuentra la gorra verde olivo con la estrella que durante los últimos años usó el ex presidente. A ambos lados del recinto hay dos amplios murales de fotografías, dentro de las que se destaca una especie de visita, sobre vuelo, que le hacen un colibrí y un tocororo a Castro.
Similar motivo le sirvió al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para decir que Chávez lo visitó convertido en un pajarito. No parecen coincidencias.
A la salida del Memorial, Inalvis Castiñeiro no estaba allí. La habían barrido como a un pájaro molesto, insistente. Delicadamente, aquel hombre vestido con guayabera blanca (¡qué pureza!) la había extraído de un ambiente inapropiado.
ernestogardiaz@gmail.com

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