jueves, 4 de septiembre de 2014

Fumigación intensa desde el aire trata de frenar epidemias


Lic. Ernesto García Díaz
Abogado y periodista independiente

En la capital, hospitales a plena capacidad de ingresos y personal médico agotado. Miembros del ejército de tierra y aire han tenido que intervenir


LA HABANA, Cuba.- Desde la pasada semana, la capital cubana está en “Alerta Máxima” por Dengue y Chikungunya, dos enfermedades transmitidas por mosquitos.
Un médico especialista en Medicina Interna, cuyo nombre no trascendió por razones de seguridad, dijo a este reportero que en el Hospital Manuel Fajardo cada día ingresan entre 25 y 50 casos con Dengue o Chikungunya. La instalación posee unas 280 camas y la mayoría de las salas están siendo utilizadas para esas enfermedades. El facultativo expresó que, en su criterio, la situación epidemiológica está fuera de control.
Y continúo explicando el galeno:
-Estamos cansados, hasta los domingos hacemos guardia. La situación es crítica y no hablemos de las atenciones que recibimos como médicos, peor no pueden ser. Muchos están como locos por que aparezcan misiones de cooperación, para soltar este clavo caliente-, según sus palabras.
La semana pasada, el gobierno militar ha elevado el nivel de vigilancia sanitaria e intensificado los trabajos de prevención.
El director nacional de Higiene y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública de Cuba, Manuel Santín Peña, en una intervención especial para el noticiero de la televisión cubana manifestó:
-Nuestro organismo mantiene bajo control las enfermedades que transmiten el Aedes aegypti, portador del Dengue, así como del vector Aedes albopictus, transmisor de Chikungunya. Existen las medidas necesarias para evitar que entre al país el Ébola; los médicos cubanos que prestan servicios en países africanos donde están esas enfermedades, tienen buen estado de salud. Mantenemos comunicación diaria con ellos-, comentó el funcionario.
El dirigente del sistema de salud cubano también le pidió al pueblo que extremara las medidas de higiene y limpieza de sus casas, patios, solares y áreas comunales. Nada más informó.
Sin embargo, en nada criticó a las direcciones de comunales y a los órganos locales del poder popular, por la ineficiencia que mantienen en la recogida de desechos sólidos y el saneamiento de la ciudad. Tampoco sugirió al gobierno central la necesidad de hacer las inversiones requeridas en este sector que posee una técnica maltrecha y obsoleta (camiones y depósitos de basuras).
Casi pierde la vida
Un trabajador de Corporación Cimex S. A, que enfermó del Chikungunya y que bajo anonimato conversó con este periodista, dijo haber ido al médico “y me diagnosticaron posible Dengue. Bajo mosquitero estuve en mi casa varios días, pero la fiebre me deterioraba… Sobreviví gracias a la alimentación. Cuando llegué a la Covadonga, un enfermo picado por el mosquito murió; me afectó mucho, no pensé que podría estar narrando este hecho. El Hospital está muy deteriorado. Así es como estamos, si te enfermas e ingresas y vives es un milagro”.
El gobierno cubano no informa sobre la cantidad de ingresos y muertes que han ocurrido por esas enfermedades en el país.
Miembros del ejército de tierra y aire han tenido que intervenir. Camiones cisternas acompañados con patrullas de la Policía Nacional y helicópteros de las tropas del ejército occidental (Fuerzas Armadas de Cuba), se han habilitado con aparatos de fumigación, esparciendo humo y lluvias de algún producto paliativo por diferentes puntos de la ciudad.

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